domingo, 23 de agosto de 2015

Intensamente

Nuestra vida esta compuesta por una serie de acontecimientos que nos mueven el piso. Cambiando así la estructura de nuestras relaciones, nuestra manera de pensar y nuestros sueños.

Hace unas semanas vi la película intensamente. Película en la cual podemos ver adentro de la cabeza de los personajes y como se da el razonamiento. Al ver la película me puse a pensar cual era la "emoción" jefe de mi cabeza y tristemente me di cuenta que era TRISTEZA. Esa era la emoción que estaba a cargo de mis decisiones y como me sentía la mayoría del tiempo. 

Que hice para cambiar mi emoción jefe 

Poner el foco de mi felicidad en otras cosas
Planee un viaje corto, con mi esposo, de compras y paseo que me subió la felicidad en dos maneras: cuando lo planeaba y cuando lo hicimos. La pasamos súper bien. Disfrutamos del lugar, de nuestros amigos y hasta nos fuimos de fiesta un par de veces.
Ahora estoy planeando una escapadita a la playa, solo chicas, con mi mamá y hermana. Creo que esto de pasear es lo mío.

Pensar mucho en mi y darme pequeños regalitos de felicidad
La vida es muy corta para no comerse un buen chocolate de vez en cuando. Hoy disfruto esas pequeñas cosas que me hacer feliz, por lo menos un ratito. Un buen libro que me consume en otro mundo por horas. Un postre o un buen café. La compañía de un familiar o amigo que me puede sacar mil risas. Una buena película especial para chicas (con mucho romance). 

Los últimos meses he aprendido a ir al cine sola, ME ENCANTA! No que no me guste ir con mi esposo. Pero de vez en cuando es perfecto darme ese tiempo solo para mi. En el que YO escojo las palomitas, la película y la hora en que la quiero ver. Ya que yo soy súper enamorada, esto lo hago casi siempre cuando mi esposo esta en el trabajo.

• Mantenerme muy ocupada
Dicen que "en mente vacía entran moscas". Bueno, en mi caso eso es muy cierto. Cuando no estoy haciendo algo productivo mi mente se le ocurren pensamientos desalentadores: "No vas a ser mamá", "Todos tienen hijos menos tu", "Que inútil que eres"... 

Es por esta razón que siempre trato de estar ocupada. Después del trabajo tengo diferentes actividades: clases de yoga, pintura, reuniones con mis amigas, citas para hacerme las uñas y me acabo de hacer profesora universitaria. Mi mente solo tiene tiempo para pensar en que haré luego.

Aprovechar al máximo la gente que amo
Hoy disfruto tanto a las personas que están a mi alrededor. Abrazo a mi esposo como si no hubiera mañana, disfruto lo que me cuenta y pongo mucha atención a sus consejos e historias.

Hablo a diario con mi mamá y hermana (aunque sea por un chat). He conocido una versión nueva de mi papá que me ha permitido entenderlo y apreciarlo mejor. Le dedico tiempo a mis amigas, compartiendo con ellas cada etapa en la que estamos viviendo en este momento.

Mi emoción jefe hoy
Si me preguntan si el jefe de mis emociones ha cambiado, no les voy a mentir. Aunque TRISTEZA siga siendo el jefe, yo creo que FELICIDAD esta haciendo una lucha continua para robarle el puesto en cualquier momento.








sábado, 15 de agosto de 2015

Premio de consolación

Hoy es el día de las madres en Costa Rica y siento que por lo menos me merezco un premio de consolación.

Desde que perdí a Santi mis días de la madre han sido difíciles. Son un continuo recordatorio que no está a mi lado y que nadie piensa que soy mamá porque lo tuve un par de semanas en mi vientre. Bueno, les quiero contar, que yo si soy mamá y mi bebé está en el cielo. 

Soy mamá porque no hay día que dejo de pensar en él. Soy mamá porque mi vida cambió drásticamente cuando Santi llegó y se fue de mi lado. Soy mamá porque hice todo lo que pude por mantenerlo conmigo. Soy mamá porque uno no deja de serlo cuando su hijo se va al cielo.

Aunque aveces sea triste no me puedo olvidar de todas esas mamitas en mi vida que me ayudaron en el camino. Hoy es un día feliz, en el que se celebra a las personas más importantes del mundo, LAS MAMÁS. Sin mi mamita yo no sería quién soy. Ella guió mi vida y me dio las herramientas necesarias para ser una mejor persona. Feliz Día Mami!


lunes, 10 de agosto de 2015

La Bendita Esperanza

Esta bendita esperanza, que no muere, sí que me hace sufrir cada mes. 

No se sí les ha pasado, pero como quiero quedar embarazada, todos los meses estoy segura que estoy embarazada. Por mi parte siempre tengo todos los síntomas de una mujer que espera bebé: antojos, náuseas, súper sensible (lloro por cualquier cosa), calores, dolor de busto, etc. Sí hay un síntoma, yo lo tengo. Podrían decir que después de tres años pidiendo bebé me he convertido en una experta en embarazo psicológico.

El viernes me hice mi examen número 250 de embarazo (aproximadamente Jajajaja) ya que tenía un pequeño atraso y como me sentía SÚPER embarazada era mejor hacerme el examen (fue negativo). No se porque mi mente juega con mis sentimiento y emociones todos los meses. Lo único que se es que este proceso es muy largo para seguir sufriendo una vez al mes y algo tengo que hacer.

Me gustaría decir que tengo una buena idea pero no se me ocurre nada. Ya se que tengo que estar relajada y que como todo mundo me lo dice "cuando deje de pensar en esto voy a quedar embarazada". Bueno, necesito ayuda! Como voy a dejar de pensar en esto si en cada esquina veo bebés o mujeres embarazadas que me lo recuerdas a diario. Como voy a dejar de pensar en esto si mi concuña tiene un bebé y tengo que ver las fotos del niño todos los días en el chat familiar de whatsapp. Como voy a dejar de pensar en esto si una de mis amigas acaba de quedar embarazada.

En verdad he tratado y les cuento que estoy muy ocupada. En este momento me encuentro terminando la tesis para mi maestría, hago ejercicios, trabajo, salgo con mis amigas y familia, estoy en clases de pintura, hago las labores de mi casa y le dedico tiempo a mi esposo. No importa lo mucho que hago cada día, todavía me da tiempo para pensar en tener un bebé.

Yo entiendo que en este momento no es lo mas importante en mi mente (como los fue hace unos meses). Pero siempre esta ahí. Mi sueño es ser mamá y no estoy lista para dejarlo ir. Pensar en lo que quiero me hacer mantener mi sueño vivo hasta el día que lo puedo tener en mis brazos.